NOTICIA-ESTATAL/ALTAR AL DIA
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HERMOSILLO, SON.- Un 'trampita' de Tepic, Nayarit, fue detenido acusado de matar horas antes en Benjamín Hill y en compañía de otra persona que no ha sido detenida, a Jesús Ernesto Espinoza Quijada, de 48 años de edad.
Según un reporte de la Policía Estatal Investigadora (PEI) y de acuerdo a las primeras versiones del detenido José Ignacio Guzmán Corona, de 38 años de edad, despues de que cometieron el asesinato, ambos se dirigieron al comedor de una iglesia de esa población y más tarde cada quien tomó por su lado.
Espinoza Quijada fue brutalmente asesinado a las 13:30 horas de ayer jueves en su propio domicilio ubicado en calle D, sin número, entre Terán y San Fernando, de la colonia Fundo Legal, en Benjamín Hill.
Los agentes de la PEI hicieron el hallazgo del cuerpo luego de una denuncia ciudadana.
Al llegar al domicilio de la víctima los policías encontraron que todo estaba en desorden y fue en el piso de la cocina donde encontraron a Espinoza Quijada. Tenía una camiseta en la cabeza y estaba empapado de sangre.
Según declaraciones de los vecinos el miércoles 14 de septiembre por la tarde vieron al hoy occiso por fuera de su domicilio en compañía de dos sujetos de aspecto vago, tipo 'trampitas'.
Luego de recorrer los lugares donde se reúnen ese tipo de personas en Benjamín Hill, encontraron en el puente 1, donde pasan las vías de ferrocarril, a varios individuos, uno de los cuales coincidía con las características que los vecinos habían dado por lo que fue detenido.
Narra los hechos
José Ignacio Guzmán Corona, el detenido, narró a la PEI que él y la otra persona aún no capturada se encontraban de paso en Benjamín Hill, pues ambos habían llegado ese mismo día en un tren carguero. Incluso, declaró, ahí mismo en Benjamín Hill se conocieron.
Al ser cuestionado sobre el homicidio de Jesús Ernesto, Guzmán Corona manifestó que él y su compañero llegaron al domicilio del hoy occiso con la finalidad de podar un árbol y que al terminar el trabajo la víctima los invitó a quedarse a dormir. Ambos accedieron y él se quedó en un sillón y su compañero en el cuarto del hoy fallecido.
El presunto asesino añadió que a la mañana siguiente, el jueves, como a las ocho aproximadamente, su compañero le pidió dinero al hoy occiso y éste le dijo que no tenía, por lo que ambos empezaron a discutir hasta llegar a los golpes. En ese momento él se metió a la riña y sometió a Jesús Ernesto por la espalda, para posteriormente amordazarlo con un trapo.
Enseguida, abundó, su compañero le encajó a Jesús Ernesto Espinoza Quijada una navaja en el cuello y después en el estómago, pero la víctima seguía forcejeando por lo que entre los dos lo golpearon hasta quitarle la vida.
Luego del crimen ambos se dirigieron a la Iglesia, donde hay un comedor para personas indigentes. Más tarde se separaron.
Las autoridades aún ignoran el nombre y el paradero del cómplice de Guzmán Corona.
