La Condusef asegura que la responsabilidad de no involucrarse con instituciones no registradas recae en los usuarios
CIUDAD DE MÉXICO.- La falta de servicios financieros formales en el país, abre la puerta para que aparezcan en México entidades no reguladas ni vigiladas por las autoridades.
Tal es el caso de supuestas cajas de ahorro que se establecen en determinadas regiones del país y de manera ilegal atraen a ahorradores bajo la promesa de devolverles sus recursos con creces, explica Marco Carrera, vocero de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Ante tal situación, el funcionario advierte que el propio cliente es quien debe cuidarse de no caer en la trampa de los defraudadores, ya que al no ser entidades reguladas ni vigiladas, las autoridades no tienen margen de maniobra para castigar al delincuente y devolverle sus recursos al cliente.
Tanto la Condusef como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) lo que han hecho, en particular la segunda, es revelar los nombres de las firmas que están actualmente operando al margen de las autoridades y que captan recursos.
De acuerdo con información de la CNBV, al momento hay 39 entidades detectadas que captan recursos del público sin tener permiso para hacerlo.
Algunas de las zonas donde han aparecido son el Distrito Federal, Jalisco, Nuevo León, Yucatán, Puebla, Oaxaca, Estado de México y Guanajuato.
“Son establecimientos sobre los cuales no se tiene control porque aparecen, se allegan de clientes, los estafan y pronto desaparecen sin dejar rastro”, dice.
Por esta razón, destaca la necesidad de que aquellas personas que pretendan ahorrar o realizar una inversión, se cercioren en las páginas de la Condusef (www.condusef.gob.mx) y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (www.cnbv.gob.mx) si la entidad con la que establecerán un contrato se encuentra debidamente registrada.
“Cuando existe alguna anomalía o maltrato por parte de alguna firma formalmente establecida, hay mecanismos para poder apoyar al cliente y recuperar sus recursos”, afirma.
Pero al no tener registro respecto a la constitución empresarial de la firma, representantes legales de la misma y datos del dueño, esto es imposible ayudar a los clientes defraudados.
CIUDAD DE MÉXICO.- La falta de servicios financieros formales en el país, abre la puerta para que aparezcan en México entidades no reguladas ni vigiladas por las autoridades.
Tal es el caso de supuestas cajas de ahorro que se establecen en determinadas regiones del país y de manera ilegal atraen a ahorradores bajo la promesa de devolverles sus recursos con creces, explica Marco Carrera, vocero de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Ante tal situación, el funcionario advierte que el propio cliente es quien debe cuidarse de no caer en la trampa de los defraudadores, ya que al no ser entidades reguladas ni vigiladas, las autoridades no tienen margen de maniobra para castigar al delincuente y devolverle sus recursos al cliente.
Tanto la Condusef como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) lo que han hecho, en particular la segunda, es revelar los nombres de las firmas que están actualmente operando al margen de las autoridades y que captan recursos.
De acuerdo con información de la CNBV, al momento hay 39 entidades detectadas que captan recursos del público sin tener permiso para hacerlo.
Algunas de las zonas donde han aparecido son el Distrito Federal, Jalisco, Nuevo León, Yucatán, Puebla, Oaxaca, Estado de México y Guanajuato.
“Son establecimientos sobre los cuales no se tiene control porque aparecen, se allegan de clientes, los estafan y pronto desaparecen sin dejar rastro”, dice.
Por esta razón, destaca la necesidad de que aquellas personas que pretendan ahorrar o realizar una inversión, se cercioren en las páginas de la Condusef (www.condusef.gob.mx) y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (www.cnbv.gob.mx) si la entidad con la que establecerán un contrato se encuentra debidamente registrada.
“Cuando existe alguna anomalía o maltrato por parte de alguna firma formalmente establecida, hay mecanismos para poder apoyar al cliente y recuperar sus recursos”, afirma.
Pero al no tener registro respecto a la constitución empresarial de la firma, representantes legales de la misma y datos del dueño, esto es imposible ayudar a los clientes defraudados.