HERMOSILLO,SONORA.- De acuerdo a estimaciones oficiales más recientes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), alrededor de 800 mil sonorenses viven en situación de pobreza y cerca de un millón de personas en estado de vulnerabilidad, esto es, a un paso de la pobreza, informó Gabriela Grijalva Monteverde.
La rectora del Colegio de Sonora, indicó que por la magnitud del fenómeno, así como por la densidad poblacional, la contribución de Sonora a la pobreza del país es relativamente baja, por lo que cabe esperar que la entidad continúe recibiendo montos equivalentemente bajos de la federación para el combate a la pobreza.
Lo anterior hace imperioso que los gobiernos locales (estatales y municipales) destinen recursos propios al combate a la pobreza, pues de otra manera las condiciones para la reproducción de la pobreza en la entidad continuarán y se recrudecerán.
Subrayó que la pobreza entendida en su multidimensionalidad requiere de estrategias de combate igualmente multidimensionales. En ese sentido, se requiere que las diferentes instancias de gobierno (educación, salud, vivienda, servicios e infraestructura urbana, economía, etc.) prioricen en sus agendas la atención a la población en pobreza o en estado de vulnerabilidad social.
Grijalva Monteverde, anotó que la pobreza es persistente y no es cierto que de la noche a la mañana se puede erradicar, el voluntarismo no es una buena guía, todo tiene que estar bien orientado, pero a plazos razonables, si es posible ir disminuyendo éste fenómeno.
Indicó que en Sonora, son 16 municipios donde se concentra el 91 por ciento de la población en situación de pobreza; Hermosillo, Cajeme, Navojoa, Nogales, San Luis Río Colorado, Guaymas, Huatabampo, Etchojoa, Agua Prieta, Caborca, Empalme, Puerto Peñasco, Álamos, Magdalena, Cananea y Benito Juárez.
Los municipios del sur del Estado; Navojoa, Huatabampo, Etchojoa y Álamos destacan en su forma particular por sus altos niveles de pobreza y alta contribución.
Los programas de combate a la pobreza deben redirigir una parte importante de sus esfuerzos a la atención de los pobres en el ámbito urbano, pues la mayor parte de ellos se encuentran en los municipios más urbanos de la entidad.
La rectora del Colson, consideró importante que el Gobierno del Estado asuma su responsabilidad de retomar el tema, pues para ello se creó la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), para buscar estrategias y contribuir a la disminución de éste problema en la entidad.
Igualmente todas las formas de gobierno deben buscar las formas de coordinación que permitan que todos estén sincronizados en una meta: la disminución de la pobreza.
Puntualizó que la pobreza urbana, es un problema que no se tiene la conciencia de la dimensión que se tiene desde la ciudadanía y los gobiernos en un régimen democrático deben responder a lo que la ciudadanía les demande.
“Si en la ciudadanía no existe la conciencia de la gravedad de la pobreza, sino existe la conciencia de la necesidad de pensar en términos solidarios con todos aquellos sectores que están en situación de mayor pobreza o vulnerabilidad, pues difícilmente desde otras instancias podrán ser asumidos”, apuntó.
Insistió que éste tema es importante, porque en muchas ocasiones las partes más privilegiadas de la sociedad, son poco sensibles a entender la multiplicidad de factores y las trampas de la pobreza y lo reducen todo a la voluntad de las personas… “La pobreza en Sonora no es solo un tema de voluntad, sino una construcción social que entre todos debemos de compartir”.
La rectora del Colegio de Sonora, indicó que por la magnitud del fenómeno, así como por la densidad poblacional, la contribución de Sonora a la pobreza del país es relativamente baja, por lo que cabe esperar que la entidad continúe recibiendo montos equivalentemente bajos de la federación para el combate a la pobreza.
Lo anterior hace imperioso que los gobiernos locales (estatales y municipales) destinen recursos propios al combate a la pobreza, pues de otra manera las condiciones para la reproducción de la pobreza en la entidad continuarán y se recrudecerán.
Subrayó que la pobreza entendida en su multidimensionalidad requiere de estrategias de combate igualmente multidimensionales. En ese sentido, se requiere que las diferentes instancias de gobierno (educación, salud, vivienda, servicios e infraestructura urbana, economía, etc.) prioricen en sus agendas la atención a la población en pobreza o en estado de vulnerabilidad social.
Grijalva Monteverde, anotó que la pobreza es persistente y no es cierto que de la noche a la mañana se puede erradicar, el voluntarismo no es una buena guía, todo tiene que estar bien orientado, pero a plazos razonables, si es posible ir disminuyendo éste fenómeno.
Indicó que en Sonora, son 16 municipios donde se concentra el 91 por ciento de la población en situación de pobreza; Hermosillo, Cajeme, Navojoa, Nogales, San Luis Río Colorado, Guaymas, Huatabampo, Etchojoa, Agua Prieta, Caborca, Empalme, Puerto Peñasco, Álamos, Magdalena, Cananea y Benito Juárez.
Los municipios del sur del Estado; Navojoa, Huatabampo, Etchojoa y Álamos destacan en su forma particular por sus altos niveles de pobreza y alta contribución.
Los programas de combate a la pobreza deben redirigir una parte importante de sus esfuerzos a la atención de los pobres en el ámbito urbano, pues la mayor parte de ellos se encuentran en los municipios más urbanos de la entidad.
La rectora del Colson, consideró importante que el Gobierno del Estado asuma su responsabilidad de retomar el tema, pues para ello se creó la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), para buscar estrategias y contribuir a la disminución de éste problema en la entidad.
Igualmente todas las formas de gobierno deben buscar las formas de coordinación que permitan que todos estén sincronizados en una meta: la disminución de la pobreza.
Puntualizó que la pobreza urbana, es un problema que no se tiene la conciencia de la dimensión que se tiene desde la ciudadanía y los gobiernos en un régimen democrático deben responder a lo que la ciudadanía les demande.
“Si en la ciudadanía no existe la conciencia de la gravedad de la pobreza, sino existe la conciencia de la necesidad de pensar en términos solidarios con todos aquellos sectores que están en situación de mayor pobreza o vulnerabilidad, pues difícilmente desde otras instancias podrán ser asumidos”, apuntó.
Insistió que éste tema es importante, porque en muchas ocasiones las partes más privilegiadas de la sociedad, son poco sensibles a entender la multiplicidad de factores y las trampas de la pobreza y lo reducen todo a la voluntad de las personas… “La pobreza en Sonora no es solo un tema de voluntad, sino una construcción social que entre todos debemos de compartir”.