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CIUDAD DE MÉXICO.- Los tres principales partidos políticos se preparan para concretar reformas estructurales que fortalezcan la economía.
Un día después de que el presidente Enrique Peña Nieto llamó para que se logren los instrumentos legales que permitan mejorar las condiciones en el país, PRI, PAN y PRD coinciden en la urgente necesidad de una reforma fiscal que haga eficientes los mecanismos de recaudación de impuestos.
De acuerdo con los lineamientos de las agendas legislativas que se preparan en el Senado, para el próximo periodo de sesiones que comienza el primero de febrero, PAN y PRI están dispuestos a la revisión del impuesto al consumo, como el IVA, pero siempre con una protección especial a las clases más desprotegidas.
El PRD no quiere la revisión del IVA, pero sí el aumento de impuestos a los más ricos, así como la eliminación del Régimen de Consolidación Fiscal que, a su consideración, ha permitido que grandes empresas evadan impuestos.
En los documentos de trabajo se refleja que los tres principales partidos pretenden la ampliación de la base contribuyente y una revisión del sistema de coordinación fiscal, para que los estados tengan más oportunidad de aumentar sus ingresos.
Para el priista José Francisco Yunes, presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, su grupo parlamentario considera que todos los temas deben ser sometidos a debate. Para los panistas, será fundamental el tema fiscal y el energético.
Pese a que la discusión está agendada en las bancadas del Senado, ayer la perredista Dolores Padierna aseguró que el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, dijo que primero se cabildearán las reformas estructurales y confían en que hasta después de mayo sean presentadas ante el Congreso.
Congreso apremia reforma fiscal
Los institutos políticos coinciden en la mejora de la recaudación y combatir la evasión y elusión de contribuyentes.
PRI, PAN y PRD coinciden en la necesidad y urgencia de la reforma fiscal y hacendaria para aumentar de manera considerable la recaudación, y antes de modificaciones al IVA, tanto a su tasa como a su aplicación, van por la revisión de los regímenes fiscales especiales.
De acuerdo con los lineamientos generales de las agendas de trabajo legislativo de los tres principales partidos en el Senado de la República, PAN y PRI coinciden en la necesidad de revisar el impuesto al consumo, como el IVA, pero siempre con una protección especial a las clases más desprotegidas.
El PRD no quiere la revisión del IVA para quitarlos a alimentos y medicinas, pero sí el aumento de impuestos a los más ricos, así como le eliminación del Régimen de Consolidación Fiscal, que ha permitido a grandes consorcios empresariales evadir impuestos.
Los documentos dejan ver que los tres principales partidos políticos coinciden en la mejora de los mecanismos de recaudación, en la revisión de todos los impuestos, pero también en la consecuente ampliación de la base contribuyente y una revisión del sistema de coordinación fiscal, para que los estados tengan más oportunidad de aumentar sus ingresos fiscales.
En entrevista, Luis Miguel Barbosa, coordinador de los senadores del PRD, explicó que la reforma hacendaria, que incluye la fiscal, es urgente, porque “muchos de los compromisos del Pacto por México, los que se refieren a política social, solamente son financiables con una política fiscal muy profunda, que inclusive abarque inversión privada en asuntos del gas, de perforación, o que incluya el análisis de créditos al consumo. Eso va a provocar un punto coyuntural muy difícil de transitar, que los firmantes del Pacto pudieran verse comprometidos a contribuir en una reforma fiscal que sea la necesaria para poder financiar esos rubros sobre política social que tiene el Pacto.
“Entonces, nuestra posición en el Partido de la Revolución Democrática sigue siendo no al IVA en alimentos y medicinas. No a la inversión privada en Pemex, sí a revisar los asuntos de exención, el esquema de consolidación fiscal y sí al esquema de aumentar la base gravable, la base de contribución, pero tenemos que identificar si nos vamos a acercar a ese momento político de dificultad, para poder transitar a una reforma fiscal profunda.
Debatir todos los temas
De acuerdo con las agendas de trabajo, que se proyectan para fijar sus prioridades legislativas en el periodo ordinario de sesiones que arranca el próximo 1 de febrero, los priistas están en la dinámica de abrir a debate todos los temas que abarcan las reformas fiscal y hacendaria, principalmente la revisión de los regímenes especiales, incluida la consolidación fiscal, pero también la coordinación fiscal entre los estados, los municipios y la federación.
Los priistas consideran que esta reforma va de la mano de una reforma energética, porque una parte importante de los ingresos fiscales del país provienen de Petróleos Mexicanos, tanto como empresa, como por los productos que vende.
De acuerdo con el priista José Francisco Yunes, presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, su grupo parlamentario no prejuzga la ruta que deberá seguir la reforma a la Hacienda pública, incluida la fiscal, pero considera que todos los temas deben ser sometidos a debate, y anticipó que el esquema que proponga el gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando considere oportuno, recibirá el respaldo de los priistas en el Congreso de la Unión.
Apuestan a los cambios
Los panistas tienen claro que una de las reformas necesarias para que el país cambie es la referente a la fiscal, hacendaria y energética.
El esquema de los panistas, de acuerdo con su agenda de trabajo analizada en agosto y que en los próximos días registrará una nueva discusión, con vistas al próximo periodo de sesiones, también es necesario hacer una revisión de todos los temas, y coinciden en la necesidad de mantener el esfuerzo de terminar con regímenes especiales, así como a mejorar los mecanismos que eviten la elusión y evasión del pago de impuestos.
Pacto por México
En el acuerdo se acordó impulsar una reforma haciendaria de gran calado.
Realizar una reforma eficiente y equitativa que sea palanca de desarrollo.
La realización de los objetivos establecidos como compromisos de ampliación de derechos sociales, así como las inversiones para detonar el crecimiento y mejorar la seguridad y la justicia requieren de fortalecer la capacidad recaudatoria del Estado. Para lograrlo se requieren los siguientes aspectos:
Eficiencia Recaudatoria.
Se mejorará y simplificará el cobro de los impuestos. Asimismo, se incrementará la base de contribuyentes y se combatirá la elusión y la evasión fiscal.
(Compromiso 69)
Fortalecimiento al Federalismo.
Se promoverán mayores y mejores facultades tributarias para las entidades y municipios, como la ampliación de las atribuciones de control y cobro.
Se fortalecerá el cobro del impuesto predial por parte de las autoridades competentes; se revisará la Ley de Coordinación Fiscal para construir una relación más equitativa entre la Federación y las entidades federativas