NOTICIA-NACIONAL/ALTAR AL DIA
GUADALAJARA,JAL.- Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana detuvieron a un joven que en pleno Centro Histórico se encontraba ofreciendo una corona de metal amarillo del templo de Nuestra Señora de Guadalupe.
Los ciclopolicías tres y nueve que transitaban por la calle López Cotilla vieron a varios transeúntes, quienes les informaron que un sujeto estaba ofreciendo a la venta una corona de la Virgen María.
En la búsqueda, los oficiales lo encontraron con las características previas en la calle de López Cotilla en el cruce con Degollado; el mismo traía una bolsa de plástico color anaranjado y dentro de la misma cargaba dicha corona envuelta en papel periódico.
Al ser cuestionado, el individuo dijo que el sacerdote de una iglesia de nombre Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en el municipio de Jocotepec, lo mandó a que valoraran la pieza a los que venden y compran metal amarillo.
Señaló que la pieza se la habían valorado en 100 mil pesos y 10 mil pesos por cada piedra que tenía incrustada.
El implicado dijo llamarse Freddy Vega Soto, de 18 años de edad, quien dijo vivir en el municipio de Ostotipaquillo, pero el domicilio proporcionado por el detenido era falso, puesto que vive con el sacerdote en Jocotepec.
Minutos más tarde se le solicitó información al sacerdote que supuestamente había pedido dicho cometido, para corroborar que la información que daba el joven fuera efectiva.
El sacerdote informó vía telefónica que la persona de quien le estaban hablando era su ahijado y que vive con él desde que era muy pequeño en la calle Juárez, colonia Zapotitlán de Hidalgo, en el municipio de Jocotepec.
Además, explicó que él no había dado autorización para dicha valoración de la corona, por lo que tuvo que venir a Guadalajara para dar su declaración.
El sacerdote explicó que la pieza está valuada en 250 mil pesos, sin contar las 76 circonias originales y un diamante, el cual fue donado por una joyería, que sumaría un total aproximado de 500 mil pesos; la corona tiene grabado en la parte interior la leyenda “Bicentenario de Huejohutlán 2010”.
Vega Soto se transportaba en un vehículo Volkswagen Jetta, color rojo, con placas del estado de Jalisco, en cuyo interior traía una burbuja de color rojo para policía y cinco canastos para limosna.
Fue llevado a las instalaciones del Ministerio Público Federal de la Agencia Mixta, para su investigación