NOTICIA-INTERNACIONAL/ALTAR AL DIA
ROMA,ITALIA.- Los muertos por el terremoto que
sacudió la región italiana de Emilia Romagna (norte) son oficialmente 17 y el
principal problema es dar asistencia a las cerca 14 mil personas que no han
podido volver a sus casas y duermen en tiendas de campaña o en vagones de
trenes.
De las 17 víctimas mortales, 11 murieron al desplomarse el techo de sus
lugares de trabajo, otras cinco al derrumbarse su casa y un sacerdote al caerse
el techo de su parroquia.
Los bomberos excavaron durante toda la noche en búsqueda del trabajador
desaparecido de la fábrica Haematronic, cuyo derrumbe produjo la muerte ayer de
otras tres personas en Medolla.
En la localidad de San Felice sul Panaro murieron al desplomarse el techo de
la fabrica de construcción en la que trabajaban un marroquí, un indio y un
técnico italiano, que había acudido al lugar para comprobar su estabilidad.
El resto de fallecidos se produjeron en Mirandola, Cavezzo, Novi di Modena y
Cento y hay más de 350 heridos.
Investigan derrumbes
Ante estas cifras, los sindicatos italianos acusaron a las empresas de haber
forzado la vuelta al trabajo a los empleados en estructuras que podían haber
sido dañadas por el terremoto registrado el pasado 20 de mayo.
La fiscalía de Módena ha abierto una investigación para aclarar el derrumbe
de los edificios y de las naves industriales, muchos de ellos de construcción
reciente.
Cuando la tierra volvió a temblar ayer, la región de Emilia Romagna aun no se
había recuperado del terremoto del 20 de mayo, que causo siete muertos, más de 6
mil evacuados e importantes daños tanto a la industria, como a la agricultura y
al patrimonio artístico del país.