Ciudad de México.- El presidente Felipe Calderón criticó la forma en que resolvieron los jueces en Chihuahua el caso de Rubí, la hija asesinada de Marisela Escobedo, al señalar que “por un formalismo” no condenaron al homicida confeso.
Calderón, durante una participación en los Diálogos por la Seguridad, calificó como desgracia lo ocurrido en el caso de esta mujer, quien también fue asesinada en Chihuahua en diciembre pasado.
“Duele mucho que el esfuerzo que se hace por sociedad y gobierno por combatir la criminalidad se debilite finalmente en la última etapa”, dijo al referirse al trabajo en general de los jueces.
El mandatario federal aunque apuntó que no son todos, ni la mayoría de ellos, “llega a haber jueces que más jueces son verificadores de requisitos, es decir, hacen un check list de todas las cosas que finalmente deben cumplir”.
Felipe Calderón hizo un “respetuoso” llamado al Poder Judicial para que revise la forma en la que trabaja.
