NOTICIA-ESTATAL/ALTAR AL DIA
CD. OBREGÓN.-Un abogado de 60 años de edad murió mientras era interrogado por la Policía, en las instalaciones de Seguridad Pública de Ciudad Obregón.
Los hechos se registraron minutos después de las 8:00 de la mañana de este lunes, en momentos en que agentes de la Policía Preventiva Municipal le preguntaban sus datos personales antes de ser internado en una celda a cumplir un arresto de 24 horas.
Se trata de Isidro Rodríguez Núñez, quien tenía su domicilio en el número 3754 de la calle Nueva Castilla, fraccionamiento Villas del Rey.
De acuerdo con la información recopilada, Rodríguez Núñez fue presentado ante Barandilla en cumplimiento de una orden de arresto girada por el Juzgado Cuarto de lo Civil.
El agente policiaco de turno empezó preguntándole su nombre y domicilio, así como su edad y profesión, a lo que el aludido respondió con tranquilidad y cuando casi terminaba el interrogatorio para mandarlo a internar a una celda, empezó a agitarse su respiración mientras se llevaba ambas manos al pecho y unos segundos más tarde cayó al piso.
Acto seguido un agente llamó al médico de guardia, el que al ver lo que sucedía presumió se trataba de un infarto, procediendo enseguida a practicarle respiración cardiopulmonar, procedimiento al que la víctima del infarto reaccionó de manera positiva y comenzó a respirar de nuevo, pero luego recayó y el médico mandó a un agente a la clínica del IMSS, ubicada a un costado de Seguridad Pública, a pedir una cánula para extraer la flema acumulada en la tráquea.
Con la premura del caso el agente llegó minutos más tarde con la cánula, logrando superar momentáneamente el problema, llegando en ese instante paramédicos de la Cruz Roja, los que de inmediato procedieron a trasladar al enfermo al Hospital General.
Ya en ese nosocomio Rodríguez Núñez fue atendido en la sala de urgencias pero unos minutos después sufrió otro infarto y por más esfuerzos que hicieron los médicos por revivirlo, no se logró, por lo que se le declaró oficialmente muerto.
Al hacerse los estudios previos a la necropsia no se encontraron señales de golpes ni herida alguna, por lo que se presume que ya tenía problemas cardiacos.
