viernes, 8 de julio de 2011

No hubo clemencia. Texas ejecuta a mexicano

NOTICIA-INTERNACIONAL/ALTAR AL DIA


HUNTSVILLE.— El mexicano Humberto Leal García fue ejecutado ayer en la prisión de este condado en Texas, por la muerte de una joven de 16 años en 1994, luego de pedir perdón a familiares y de que sus últimas palabras fueran “Viva México, Viva México, Viva México”.
Leal García, de 38 años, fue declarado muerto a las 18:21 horas locales, exactamente diez minutos después de que se inició la aplicación de las inyecciones en la Cámara de la muerte de la sala Walls, del recinto carcelario.
En sus últimas palabras se declaró arrepentido de sus acciones y pidió el perdón de los familiares de la víctima, Adria Sauceda, asesinada y violada hace 16 años en una carretera de Texas, aunque nunca volteó su rostro hacia la zona de los deudos.
“Siento todo lo que he hecho, he lesionado a mucha gente, por años nunca pensé que merecía ningún tipo de perdón, sé que el señor Jesucristo me ha perdonado en vida y he aceptado su perdón, ya he aceptado todo, dejemos que esto sea el final que se haga, asumo toda responsabilidad por esto”, dijo.
“Lo siento y perdónenme, verdaderamente lo siento, les pido perdón, la vida sigue y seguramente seguirá. Lo siento por la familia de las víctimas, por lo que hice, pero espero que me perdonen, no sé si me creen, la vida sigue”, añadió Leal García.
Para terminar, se dirigió al guardia a cargo de la ejecución que se encontraba a su diestra y le dijo: “Le pido perdón, la vida sigue y seguirá, perdón, estoy verdaderamente arrepentido. Que siga el espectáculo. Una cosa más: Viva México, Viva México, Viva México”.
Antes de que terminara, su abogada, Sandra Babcock, se sumó: “Viva México, cabrones”.
Vestido con un overol y cubierto hasta el pecho con una sábana blanca, sólo eran visibles sus manos vendadas y la muñeca, donde se veían las sondas con los tres líquidos letales. Súbitamente quedó dormido, hizo un sonido balbuceante con los labios y quedó inmóvil.
Entre los familiares de Leal García sólo estaba su hermana Mary Ángel Tello. En la sección de las víctimas sólo asistió un amigo del padre de Adria Sauceda.
La ejecución ocurrió después de que la Suprema Corte de Justicia desechó las peticiones de sus abogados y de EU y México para suspender la ejecución por la violación de la Convención de Viena.
El gobierno federal condena la decisión
El gobierno federal condenó la ejecución del mexicano Humberto Leal García, ocurrida la tarde de ayer en la cuidad de Huntsville, Texas.
El connacional fue condenado a la pena de muerte por la autoridad judicial de ese estado, por el asesinato de una joven de 16 años; sin embargo, en ningún momento le permitieron contar con la asistencia legal del consulado mexicano, lo que significa una violación a la Convención de Viena sobre derecho consular.
En 2004, México llevó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) el caso de 50 mexicanos, a quienes al igual que a Leal García, no se les permitió contar con la asistencia de sus consulados en el momento en el que estaban siendo juzgados por un delito en la Unión Americana.
Entonces, la CIJ emitió el fallo del “caso avena”, que obliga a las autoridades judiciales de Estados Unidos a revisar el proceso legal y el veredicto que se emitió en cada uno de los casos de los mexicanos a los que no se les permitió contar con la asistencia legal de su consulado.
Pero hasta la fecha, las autoridades judiciales de esa nación no han cumplido con el fallo de la CIJ. En ese sentido, el gobierno de México condenó: “En los términos más enérgicos la ejecución del nacional mexicano Humberto Leal García, pues es un claro desacato al fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en el caso avena de 2004”.
También lamentó que el gobernador de Texas, Rick Perry, no hiciera uso de la facultad con la que contaba para suspender dicha ejecución, esto, a pesar de que México, así como el mismo presidente estadunidense, Barack Obama, pidieron la suspensión de la ejecución.
Las autoridades mexicanas enviaron una nota de protesta al Departamento de Estado de ese país, por la ejecución de Leal García, argumentando que con esa acción el gobierno de Estados Unidos está violando el derecho internacional.
La cancillería aseguró que agotó todas las instancias legales para la defensa de Leal García e incluso el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán, llamó al gobernador de Texas, “quien no tomó la llamada, por lo que se reiteró a su jefe de gabinete la posición del gobierno de nuestro país”.
La familia confiaba en cambio del fallo
Entrevistado tres horas antes de la ejecución, Alberto Rodríguez, tío de Humberto Leal, el mexicano condenado a muerte en Estados Unidos por el delito de violación y homicidio en contra de una menor de edad, dijo que la última palabra la tenía el gobernador de Texas, Rick Perry.
“Ayer (miércoles) fue la primera vez que él tuvo un momento para atendernos y nos ofreció mucha ayuda de lo que quedaba de tiempo y prometió hacer hasta lo imposible por ayudar”, dijo.
En entrevista con Francisco Zea, de Grupo Imagen Multimedia, Rodríguez reiteró que la decisión del gobernador de Texas les podía ayudar: “Nosotros lo que le pedimos a él es que si tiene línea directa con él, una llamada y la decisión del gobernador nos puede ayudar”, añadió.
Por otra parte, el tío de la víctima señaló que tiene en su poder pruebas a favor de su sobrino; sin embargo, no especificó cuáles ni de qué tipo.
Añadió que desde la primera corte en la que estuvo presente Humberto Leal hubo muchas irregularidades, por ejemplo, discriminación racial por parte del juez que llevó el caso. “Este juez, desde que lo paró en ese momento en la corte le dijo: “Te voy a matar perro mexicano”, yo lo sé por viva voz de él y de su papá (…) yo siento que es el mismo juez que ha llevado todo el proceso, hay un rencor contra él”, dijo.