NOTICIA-NACIONAL/ALTAR AL DIA
CUERNAVACA, MORELOS- El poeta Javier Sicilia pidió a los cárteles de la droga que se manifiesten, a través de narcomensajes o de llamadas telefónicas, para que digan si están dispuestos a parar la violencia y cuidar a la ciudadanía, pero que lo hagan de forma decente, sin muertos. “Mi segundo mensaje es a los narcotraficantes, del crimen organizado como se les ha llamado, ellos tienen muchas formas de hablar, a través de las mantas, a través de las redes de internet”, dijo. Agregó, “yo les digo desde aquí, a través de la amplificación de los medios de comunicación, si realmente quieren dejarnos en paz; nosotros no somos la gente, la ciudadanía, que tiene broncas con ellos”. El poeta lo ve como un problema de salud y no lo juzga, “no sabemos, no los estamos juzgando, yo veo muy mal lo que hacen, pero no se trata de juzgarlos, es su asunto, ellos han decidido vivir de ciertas cosas”. También pidió una respuesta ante la propuesta que lanzó desde el pasado viernes 1 de abril, cuando por primera vez se dirigió a los medios de comunicación, y planteó a los narcotraficantes que volvieran a los códigos de honor, para respetar la vida de los niños, mujeres e inocentes. “Pero cuando yo les dije vuelvan sus códigos de honor, quiero que nos digan si realmente están dispuestos a respetarnos como ciudadanía, si nos van a proteger, si no nos van a matar, si no se van a meter con nosotros no van a matar a nuestros hijos, no van a sembrar el terror en esta nación.” En este mismo sentido, pidió que su comunicación con los ciudadanos sea de una manera decente, “y que no los hagan saber de una manera decente, si quieren con mantas pero no con cadáveres, si quieren por las redes de internet, si quieren con llamadas a la prensa”. Y exigió que como quieran hacerlo, pero que lo hagan, “porque ya no podemos más, estamos desgarrados, si ellos quieren reinar su mundo... no sé para qué quieren una ciudadanía llena de miedo, no sé para qué quieren eso”. Consideró que la respuesta que espera la sociedad es que los narcotraficantes digan “no los vamos a tocar más, vamos a amarrar a nuestros demonios”, que permitan rehacer el tejido social, rehacer la nación con educación. El poeta llamó a los sistemas de justicia a investigar para devolverles la dignidad a las miles de familias que han sido difamadas, porque sus parientes han sido asesinados por el crimen organizado o acusados falsamente de formar parte de estas redes criminales. Pero no sólo eso, sino también le pidió a los gobiernos indemnizar a las familias de los inocentes, porque muchas de ellas perdieron todo, lo único que tenían para vivir, que era sus seres queridos, y aclaró que el no pide nada. Sobre la guerra contra el narco, dijo que en este momento sería un error sacar al Ejército de las calles, porque ahora hay otro ejército formado por narcotraficantes, que amenaza a la sociedad y sacar a las Fuerzas Armadas sería dejar en la indefensión a las familias. Pero pidió que el Ejército deje de ver a los ciudadanos como bajas colaterales y que conserve como eje central de sus acciones los derechos humanos, ya que eso le permitirá conservar su casa limpia
