En la comisaría de Cócorit Presuntamente fueron citados en el sitio del crimen
Por.-Martín Alberto Mendoza
CD.- OBREGÓN SONORA.-Con ráfagas de “cuerno de chivo” al inicio de la madrugada de ayer, dos elementos de la policía municipal fueron abatidos por un grupo de desconocidos sobre un camino de terracería ubicado frente al canal “Porfirio Díaz” a unos 700 metros al Norte de la calzada Antonio Valdez Herrera, en Cócorit. El criminal atentado fue perpetrado poco después de la una de la mañana y cobró la vida del suboficial Israel Tejeda Aceves y el agente Francisco Efraín Rosas García, de 49 y 33 años de edad, respectivamente. Sus cuerpos acribillados y parcialmente deshechos, quedaron a unos diez metros de la radiopatrulla 481 en la que cumplían con su labor de vigilancia en la comisaría de Cócorit, donde el primero ya tenía un año y el segundo apenas dos semanas comisionados en esa demarcación. Aunque oficialmente se dijo que los uniformados realizaban recorridos de vigilancia por diversos sectores de esa comunidad rural cuando advirtieron que frente al “Porfirito” estaba un automóvil de color blanco. No descarta que pudiera tratarse de un Altima o Bora. Sin embargo, fuentes extraoficiales revelaron que los ahora occisos momentos antes de la cita final con su destino, se encontraban cenando con otros dos compañeros que eran parte de los únicos cuatro policías que estaban a cargo de la seguridad de esa comisaría. Se menciona que en ese momento sonó el teléfono celular de Rosas García, quien acordó con la persona que estaba en el otro extremo de la línea que se verían en algún lugar y se levantó del sitio donde ingería sus alimentos. Fue seguido por Tejeda Aceves, abordando ambos la patrulla 481 en la que se retiraron, sin imaginar que ya no regresarían con vida. Todavía estaban sus compañeros en ese punto, cuando escucharon varias detonaciones y al suponer que sus compañeros habrían sufrido un ataque, no acudieron en su auxilio hasta llegó el apoyo de policías comisionados en Estación Corral a quienes les comunicaron lo sucedido. Fue así como se trasladaron hasta una de las márgenes del “Porfirito” y hallaron la patrulla con luces y motor encendido. A unos diez metros de ahí quedaron los cuerpos sin vida de Tejeda Aceves y Rosas García. El primero, estaba boca abajo. Hay versiones que indican que supuestamente los agentes caídos fueron obligados a hincarse y posteriormente ejecutados. Señalan que el primero de los uniformados no logró sacar su arma de la funda, mientras que al segundo presuntamente le fue robada su pistola de cargo, por los victimarios. Antes de su ejecución, se dijo, que los ahora occisos, habían tratado de revisar a los ocupantes de un automóvil de color blanco, de donde descendieron al menos dos sujetos embrazando fusiles de los llamados “cuerno de chivo” y abrieron fuego a mansalva contra los cumplidos representantes de la ley. Las características del vehículo de los sospechosos fueron transmitidas al C-4 por los uniformados quienes después ya no se volvieron a escuchar. Una vez que autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) arribaron al lugar de la doble ejecución y realizaron una inspección ocular, hicieron el aseguramiento de casi 30 casquillos percutidos calibre 7.62X.39 disparados por armas AK-47.
DESCONCIERTO E IMPOTENCIA
Mientras llegaba un día más de labores, ayer, en la comandancia de Policía Preventiva y Tránsito Municipal, el ambiente se impregnó de impotencia y tristeza entre los compañeros de los agentes caídos, que aunque estaban comisionados en Cocórit eran ampliamente conocidos. A Israel Tejeda Aceves le faltaba menos de un año para jubilarse. Había cumplido 27 años de servicio en las filas del estado de fuerza operativo de la corporación. Aunque también será recordado como uno de los mejores radiooperadores al frente de la frecuencia de esa institución. Desde el 16 de enero de 1986 en que ingresó a la corporación “Tejeda” como le llamaban sus compañeros, siempre se distinguió como buen policía de tropa y participó de manera relevante en la captura de peligrosos delincuentes. Aseguran que cumplió con su deber sin dejar manchada su hoja de servicio. En tanto que Francisco Efraín Rosas García, se enroló en las filas policiales el 22 de enero del 2007, aunque anteriormente en el 2001 estuvo trabajando un tiempo. Apenas en marzo de este año se había reincorporado a la corporación, después de desempeñar el cargo de director de Seguridad Pública en el municipio serrano de San Javier, cerca de Hermosillo, donde estuvo desde enero del 2010. En torno a este trágico acontecimiento, compañeros de los hoy fallecidos, se mostraron hondamente consternados asegurando que cada vez su seguridad es más vulnerable, afirmando que hoy entre los mismos mandos hay insensibilidad. “Antes mataban a un policía y los jefes trabajaban incansablemente por ir tras su captura. Hoy todo es distinto y esto nos deja un triste sabor de impotencia y desconcierto”, coincidieron en señalar. Finalmente se dijo que los restos mortales de Israel Tejeda Aceves serían velados en el domicilio de su señora madre, en calle Calles entre Revolución y Zaragoza, en la colonia Benito Juárez, y Rosas García, en funeraria Robles de Esperanza. Se previó que hoy a las 9 de la mañana se les rendirá un homenaje póstumo en la sede de la jefatura de Policía y Tránsito Municipal, antes de que rindan tributo a la madre tierra.